domingo, 14 de octubre de 2012

Re-inventarse


Con frecuencia se escucha en estos momentos de turbulencias empresariales, que es necesario que las organizaciones se reinventen para sobrevivir y mantenerse vigentes en el contexto actual. Si revisamos con cuidado el ejercicio de reinvención debemos atender algunas consideraciones, que nos permitan comprender qué significa esta actividad y los alcances de la misma, toda vez que no es algo exclusivo de la crisis, sino de la vida diaria.

Reinventarse a sí mismo, es volver a encontrarse consigo mismo, enfrentar los miedos actuales, mantener las cosas en perspectiva, remover los filtros emocionales, identificar necesidades, escuchar más y hablar menos, identificar otros con conocimientos y habilidades diferentes, mantener el foco en “quién” y no en “qué” eres, estar abierto a las posibilidades y combinar lo que hemos aprendido con lo que sabemos.

Todas estas condiciones, exigen de nosotros, darnos la oportunidad de encontrar en cada momento una forma diferente de ver el mundo y potenciar nuestros talentos, anticipando condiciones disruptoras de la realidad, para continuar aprendiendo y compartiendo nuestro presente para crear el futuro. Reinventarse, es hacerse voluntario de la vida, es decir, una persona que se dona así misma para que otros encuentren su voz interna y alcancen su vocación.

Volverse a inventar a sí mismo, exige que realmente nos interesemos por las necesidades de los otros, encontrando en cada una de ellas formas de mercadearnos, esto es, movilizarnos desde las personas a los hechos, como una forma de construir a partir de la fuente de oportunidad (la necesidad) y adquirir las habilidades requeridas, que no sólo permiten superar la situación identificada, sino que generan valor, es decir, aquello que inspira y transforma a terceros.

Hablar de reinvención, requiere hablar el lenguaje de los negocios, de los emprendedores, un lenguaje escrito en clave de fe y esperanza, en acciones de convicción y desafío, para que, conscientes de los desafíos que exige la vida, se escriban las memorias de un futuro que ya ha sido creado en el corazón. Reinventarse, no es algo que se hace cuando se advierte una crisis, es una estrategia permanente de los seres que aspiran a ser únicos e irrepetibles, improntas indelebles que dejan historia en el mundo.

Cuando escuches que se requiere reinventar una empresa, piensa en cómo vas a reinventar tu vida y quebrar el molde de la realidad que te rodea, para así transformar tu potencial y ser vitrales de luz, traspasados por la gracia infinita que ha sido elevada y consagrada en un madero.

El Editor

No hay comentarios:

Publicar un comentario